Sofía Cada vez son más las personas que apuestan por tener cosméticos caseros por diversos motivos, pero el principal es porque saben exactamente cuáles son los ingredientes que tiene el producto que se aplican.
En este caso, vamos a hablarte sobre el limpiador facial casero, y cómo puedes hacer uno en casa.
El rostro debes limpiarlo todos los días sin excepción… y además debes hacerlo dos veces al día: tanto por la mañana como por la noche. Si no sueles comprar productos comerciales por miedo a los químicos en sus fórmulas, entonces no puedes perderte nuestra receta.
Otro aspecto que suele gustar mucho en las personas que se crean sus propios cosméticos, es que si algún ingrediente no les va bien, entonces solo tienen que cambiarlo por otro diferente. En cualquier caso, los ingredientes naturales siempre son las mejores opciones para el cuidado dérmico.
Cuando usas un producto cosmético, ya sea comercial o casero, siempre tendrá que respetar tu dermis al máximo para que de esta manera, el cuidado sea mayor. Si un limpiador para el rostro también tiene componentes para cuidar tu dermis además de limpiarla, aún sería mucho mejor.
El producto que utilices siempre tendrá que adaptarse a tus necesidades dérmicas para que de esta manera puedas tener un cuidado sublime todo el tiempo.
En este caso, podrás escoger los ingredientes para que así, encuentres los mejores resultados. Aunque ya te avanzamos que los ingredientes que hemos escogido para esta ocasión son totalmente respetuosos.
Los hemos pensado para que pueda usarlo cualquier persona, sin miedo a que le cause problemas de algún tipo. Son ingredientes que te respetarán y te darán buenos resultados desde el primer momento.
Conseguirás crear tu propio limpiador eficaz y casero, ¡hecho con tus propias manos! Los ingredientes que te vamos a decir son fáciles de encontrar, incluso puede que ya los tengas en tu hogar. Pero si no los tienes, no sufras porque serán fáciles de conseguir.
Indice
Cómo hacer tu limpiador facial casero en casa
Los ingredientes escogidos son ideales para cualquier tipo de piel y de persona. Lo puedes usar tanto si eres hombre como si eres mujer.
La cantidad de sustancia es orientativa y deberás hacer más o menos en función de tus necesidades diarias.
Qué necesitas
- 1 taza de manzanilla infusionada
- 5 gotas de aceite esencial de lavanda (opcional)
- 5 ml de aceite de jojoba
- 5 cucharadas de zumo de limón
- 2 cápsulas de vitamina E líquida (opcional)
- 2 mg de avena en polvo
- 5 ml de zumo de limón (en caso de tener la piel mixta o grasa)
- 1 bol
- 1 recipiente hermético con tapa
- 1 cuchara de madera
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Cómo hacer la receta
Cuando has mirado la lista de lo que necesitas te habrás dado cuenta que hay algunos ingredientes que son opcionales. Esto es así porque quizá no los tengas en casa.
El aceite de lavanda es buena idea para las dermis más sensibles y para añadir cierto perfume a la sustancia.
Si tienes el olfato sensible es posible que prefieras no usarlo. La vitamina E en cápsulas es ideal si quieres que el limpiador también tenga acción regenerante y rejuvenecedora.
Para hacer la receta debes seguir los siguientes pasos:
- Vierte todos los ingredientes en el orden de lista dentro de un bol, y remueve con la cuchara de madera.
- Cuando tengas una pasta homogénea, vierte toda la sustancia en un recipiente hermético y mételo en la nevera.
- Pon una etiqueta con la fecha de fabricación para saber su antigüedad.
Para usarlo, tendrás que ayudarte con discos de algodón, posiblemente necesites bastante sustancia. Permite que el producto actúe en tu rostro durante por lo menos un minuto antes de retirarlo con algodones secos. Repite la acción hasta que notes que tu rostro está totalmente limpio.
En caso de que no tengas tiempo para hacer un limpiador facial casero, entonces te aconsejo que compres un limpiador facial comercial pero que sea de buena calidad.
Cuando compres un cosmético comercial debes asegurarte de que sus ingredientes siempre sean naturales en su totalidad y que no contengan químicos, tóxicos ni irritantes que puedan dañarte de algún modo la dermis.
Con los cosméticos caseros te aseguras que no tendrán ninguna sustancia dañina y que realmente todos sus ingredientes son naturales.
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Conserva bien el producto casero
Piensa que en los productos caseros no hay conservantes ni químicos que hagan que la sustancia perdure más, por eso, deberás hacer poca cantidad, guardarlo bien y volver a hacer el producto pasados unos días.
Para guardar la sustancia no te podrá faltar un recipiente hermético con tapa y/o dosificador para que tengas la sustancia dentro y usarlo sea higiénico y guarde bien sus propiedades.
En cuanto a la conservación, lo mejor es que lo guardes en la nevera. Así, con el frío podrá durarte entre una semana y diez días en buen estado. Pero después de este tiempo será mejor que deseches el cosmético casero y que hagas otro nuevo.
Para tener un mejor control del tiempo que tiene el cosmético casero, lo ideal es que pongas una etiqueta con la fecha de fabricación y cuando pase el tiempo estimado, lo tires y hagas otro.
Incluso, aunque no haya pasado la semana o semana y media, si ves que la sustancia tiene un color u olor diferente o simplemente piensas que está en mal estado… No lo uses. Es mejor que lo deseches y que hagas otro nuevo.
Cómo utilizarlo
Para tener un rostro bien cuidado, es necesario que lo limpies correctamente todos los días, tanto por la mañana como por la noche, como te mostramos en este artículo.
Debes ser constante y de esta manera verás como tu rostro está cada vez más limpio, nutrido, hidratado, bien cuidado.
Piensa que tu rostro es la parte que está más expuesta, y por eso se deteriora fácilmente. Y la piel es delicada, sobre todo en zonas tan sensibles como los ojos o los labios.
Cuando limpias tu rostro por la mañana estarás eliminando la suciedad acumulada mientras tu piel la expulsaba durante la noche. Y por la noche, podrás eliminar todas las impurezas que se han ido acumulando en tu rostro durante el día.
Una vez que tienes el rostro totalmente limpio, entonces será el momento de aplicar el resto de cosméticos para tener una piel de lo más cuidada. Esto significa que no podrá faltarte el contorno de ojos y labios, el sérum facial, la crema hidratante y el protector solar para tu rostro (durante el día).
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En el caso de los limpiadores, uno comercial puede actuar rápidamente y acabar con las impurezas sin esfuerzo y con poca sustancia.
En cambio, los caseros pueden tardar más en hacer efecto, necesitarás más sustancia e incluso frotar (cuando frotar nunca es una buena opción porque podría causarte irritaciones y dolencias dérmicas innecesarias).
Si no tienes tiempo o ganas de hacer tu propio limpiador facial casero, entonces te aconsejamos que utilices el que más nos gusta: el agua micelar de Nezeni Cosmetics.
Ahora que ya sabes todo sobre el limpiador facial casero: cómo hacer uno en casa, y te hemos confesado una opción excelente en el caso de que no tengas tiempo para hacer tus productos caseros, ¡ya no tienes excusa para tener un rostro cuidado y limpio todo el tiempo!
